Inicio > Productos > Electrodomesticos > Cinco hábitos para prolongar la vida útil de la lavadora
Cinco hábitos para prolongar la vida útil de la lavadora
SAMSUNG TE ACONSEJA
Debido a que su uso suele ser diario, este electrodoméstico que soluciona la vida de muchos al entregar ropa limpia y perfumada, requiere ciertos cuidados básicos para mantenerse en perfecto estado como una importante aliada de la higiene.
- Un lugar ideal. – Como empresa especializada en tecnología, lo primero que te aconsejamos desde el equipo de Samsung es asignar un buen lugar a tu lavadora. Este debe estar estratégicamente localizado para proteger al electrodoméstico de la luz solar, la humedad y de fuentes de calor directas como hornos o calentadores. También recomendamos verificar que el piso esté nivelado para evitar vibraciones o ruidos de la máquina.
- Aduana de prendas. – Es común olvidar elementos dentro de nuestros bolsillos por eso es importante destinar unos breves minutos a revisar la ropa antes de meterla a la lavadora. De esta forma, evitamos que ingrese con metales u objetos punzantes que podrían dañar el electrodoméstico.
- Previene la humedad post lavado. – Una vez que el ciclo de lavado termine, deja la puerta de la máquina abierta para que así el interior se ventile y se seque. Realizando esta sencilla acción, evitamos que se forme moho o que se generen malos olores.
- Hora del baño. – Cada 40 lavados, este electrodoméstico también necesita ‘lavarse’. Por eso, es importante efectuar una limpieza de tambor para eliminar residuos, bacterias, pelusas, hilos u otras partículas que aparecen durante el proceso de funcionamiento. De esta manera, prevenimos posibles tapaduras de ductos y contribuimos a prolongar la vida de la máquina.
Elige bien. - Es importante que a cada lavado se le asigne el programa que requiere. Esto no solo ayuda a ahorrar energía, también evita que la ropa se arruine y que la lavadora trabaje innecesariamente. Otro tip es no llenar el electrodoméstico hasta el tope, deja espacio de unos 10 centímetros entre las prendas y el borde superior, para que el agua y el detergente actúen con facilidad sobre ellas.